Cómo me gusta sentarme en esta playa, en mi lugar favorito, mágico; a veces tan lleno que no encuentras un sitio, y te quedas solamente observando como otros ocupan su parte en la arena, y como los iluminan rayitos del sol de vuestras letras, y como son capaces de evadirlos de sus problemas.
Me encanta ver, cómo montados en barquitos de papel tan frágiles, y a la vez tan resistentes a las tormentas de nosotros mismos, cruzamos la frontera para llegar a la otra orilla, tan difícil de divisar que necesitamos de los vientos de estas letras para que nos ayuden.
Muchas veces esta playa esta vacía y desierta y me siento tranquilamente en mi sitio, solo mirando hacia el horizonte, esperando que pase mi barco y poder montarme.
A la vez esta soledad me sirve para que fluyan estos pensamientos que se convierten en estas palabras, y me encanta pasear por la orilla de mi mar. .....También cuando estoy aquí sentada a solas en el ordenador, es mi mar donde mando mis mensajes en pequeñas botellitas, mensajes que cuando mando guardan parte de mi vida, y que en realidad no sé a qué playa llegará o en qué arena quedará enterrado, aunque sé que siempre hay alguien paseando por la otra orilla, que aunque sea por curiosidad, abrirá la botella y leerá mis sentimientos atrapados entre líneas, que a la vez reflejan cómo es o cómo siente esta gaditana.
Ojalá yo alguna vez, paseando por ésta, mi orilla, encuentre algún mensaje que refleje, que no soy sólo yo la que siente así, que mi sentimiento es compartido.
Ojalá cuando esta botella se destape, y salgan a la luz mis letras, alguien que las necesite las lea, y sepa que cualquier mínimo sentimiento debe ser compartido y escuchado por los demás.
Amar -22 Jun 2003
