Sábado, 27 de Noviembre de 2004
ANTIINFLAMATORIO
El veneno de las abejas sirve para tratar más de 500 enfermedades
 
El veneno de las abejas, la apitoxina, tiene una capacidad antiinflamatoria 100 veces superior a la de la cortisona y es aplicable a unas 500 enfermedades, entre ellas las que afectan a los huesos y al sistema respiratorio.

"Las propiedades del veneno de las abejas no son muy conocidas, pero después de hacer múltiples pruebas, llevo tres años trabajando con esta terapia y los resultados son satisfactorios en el tratamiento de un elevado número de enfermedades", aseguró Adela Pérez, especialista en terapia con abejas, ante la asociación de apicultores de Burgos.

La especialista en terapia con abejas explicó que el primer paso para la actividad es tener sus propias colmenas, "porque es muy importante saber en qué condiciones se encuentran las abejas".

Una vez llega a la consulta de la terapeuta en Barcelona, cada paciente se somete a pruebas para determinar su grado de sensibilidad al veneno de las abejas y para descartar el tratamiento en caso de personas alérgicas.

El tratamiento con abejas, indicado para unas 500 enfermedades, entre ellas las que afectan a los huesos y al sistema respiratorio, está también contraindicado para personas con diabetes de tipo uno y afecciones de hígado y riñón.

Una vez diagnosticada la afección que sufre el enfermo, se utilizan los mismos puntos de la acupuntura para poner sobre ellos una abeja y que inyecte el veneno con su aguijón.

"No es un tratamiento agresivo, porque muchas personas confunden las picaduras de abeja con las de avispa, mucho más dolorosas; las picaduras de abeja producen en las personas un efecto muy parecido al de una picadura de mosquito", explicó Adela Pérez.

Otro detalle curioso, según la especialista, es que el organismo humano se llega a acostumbrar externamente al veneno de las abejas, de manera que cada vez se aprecia menos la picadura en la epidermis, pero pese a la repetición del tratamiento, el veneno no pierde su capacidad reactiva en el enfermo.
 


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