Expertos desconfían de los beneficios atribuidos a los alimentos funcionales

La Voz de Galicia - Sábado, 14 de Agosto de 2004
Antonio Paniagua


Expertos desconfían de los beneficios atribuidos a los alimentos funcionales.
Los investigadores sostienen que no hay suficientes estudios clínicos que avalen su validez
Restan valor a los cereales con fibra o yogures con bífidos
Los defensores aseguran que reducen el riesgo de enfermedades

La industria se ha subido al carro de los alimentos funcionales: leches enriquecidas con ácidos omega 3 , yogures con bífidobacterias o prebióticos, cereales con fibra, zumos con antioxidantes. Sin negar el potencial de determinados alimentos en la prevención de algunas enfermedades, los expertos creen que los beneficios que se predican de estos productos no están lo suficientemente contrastados a través de ensayos clínicos.

No faltan anuncios publicitarios en los que un personaje popular asegura haber reducido el colesterol tomando una marca de leche enriquecida con ácidos omega 3.?Comprobar esta contingencia es muy difícil. Para Susana Monereo, dirigente de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, «en general, los alimentos funcionales cumplen en teoría el cometido para el que están diseñados, pero la mayoría de ellos carece de estudios científicos que avalen de verdad las propiedades terapéuticas que se arrogan».

Promesas
Quien compre una margarina con estanoles con la promesa de que su colesterol va bajar está siendo víctima de una media verdad. Porque ignora algo tan elemental como qué cantidad ha comer diariamente para lograr ese beneficio saludable. «Para que sea efectivo de verdad, habría que tomar mucha margarina, lo que aportaría muchas calorías a la dieta», asegura Monereo.

Para la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria, la comida terapéutica no es la panacea y en modo alguno pueden sustituir a una alimentación adecuada.

Un peligro que se cierne sobre estos alimentos es que tomarlos en exceso pueden entrañar efectos indeseados. Como advierte Susana Monereo, si se exagera el consumo de las leches enriquecidas con calcio y vitamina D no es raro que aparezca litiasis, es decir, cálculos producidos por el calcio.

Muchas de las virtudes que se atribuyen a estos alimentos entran en el terreno de la especulación. Sobre el papel, diversos experimentos realizados en laboratorios de todo el mundo han demostrado que los ácidos omega 3 reducen el colesterol, pero otra cosa es que, tomados en la leche y en una alimentación normal, disminuyan el riesgo cardiovascular. A la vista del éxito, la industria de la alimentación se afana por investigar nuevos alimentos funcionales. El campo es amplísimo. Sólo en el intestino grueso hay 200 clases de bacterias, muchas de las cuales pueden mejorar la función intestinal.

Los defensores aseguran que reducen el riesgo de enfermedades
Los defensores de los alimentos funcionales no hacen más que atribuir a este tipo de comidas todo tipo de beneficios, encaminados a alargar la vida y reducir el riesgo de enfermedades.

¿Qué son los alimentos funcionales?
Son aquellos alimentos que se consumen como parte de una dieta normal y contienen componentes biológicamente activos, que ofrecen beneficios para la salud y reducen el riesgo de sufrir enfermedades.

¿Cuáles son los alimentos funcionales?
Entre algunos ejemplos de alimentos funcionales, destacan los alimentos que contienen determinados minerales, vitaminas, ácidos grasos o fibra alimenticia, los alimentos a los que se han añadido sustancias biológicamente activas, como los fitoquímicos u otros antioxidantes, y los probióticos, que tienen cultivos vivos de microorganismos beneficiosos.

¿Por qué dicen que son necesarios los alimentos funcionales?
Existe una gran variedad de alimentos a disposición del consumidor, pero en estos momentos la prioridad es identificar qué alimentos funcionales pueden mejorar la salud y el bienestar y reducir el riesgo o retrasar la aparición de importantes enfermedades, como las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y la osteoporosis.

¿Cómo están reguladas las alegaciones de salud?
La legislación europea relativa al etiquetado prohíbe atribuir a los alimentos propiedades preventivas, terapéuticas o curativas. Las alegaciones de salud deben estar adecuadamente corroboradas para proteger al consumidor, fomentar el comercio justo y potenciar las investigaciones y la innovación en la industria alimentaria.

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NOTA:
Enfin, esto todo está ahora en discusión denuevo.
Entretanto en TVE- Noticias de la 1, se ha anunciado que Dinamarca va a poner un freno a todos los alimentos con aditivos, incluso vitaminas - que en exceso pueden llegar a ser incluso perjudiciales - y exigir antes de autorizar aditivos las pruebas reales y efectivas clinicas etc. para demostrar que son mejoras en favor de una buena salud de sus ciudadanos.

Puede que el resto de la Comunidad Europea le siga.


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