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11 de Junio de 2005, número 621

FÁRMACOS
Se matizan los riesgos de los antiinflamatorios

ALEJANDRA RODRÍGUEZ

Hoy mismo, la revista 'British' 'Medical' 'Journal' ha dado, con la publicación de dos investigaciones, otra vuelta de tuerca a la polémica sobre el aumento del riesgo cardiovascular debido al uso continuado de antiinflamatorios no esteroideos (AINE) e inhibidores de la COX-2 (productos más modernos que combaten la inflamación evitando los daños gástricos característicos de los anteriores).

El primer trabajo, realizado antes de que estallase el 'escándalo' 'Vioxx', un 'coxib' retirado por sus efectos dañinos para el corazón, ha evaluado el papel de éste y de los otros productos mencionados en relación con el infarto de miocardio y ha concluido que los usuarios de rofecoxib -principio activo de Vioxx-, diclofenaco e ibuprofeno (dos AINE) elevan de forma considerable la posibilidad de sufrir un ataque cardiaco (en un 32%, un 55% y un 24%, respectivamente), un perjuicio que era aún más evidente entre los mayores de 65 años.

El resto de los antiinflamatorios estudiados (tanto 'coxibs' como AINE) también tenían esta consecuencia negativa, pero las cifras son menos alarmantes. Además, el hecho de consumir estos medicamentos parece incrementar el riesgo cardiovascular independientemente de otros parámetros como la obesidad, la edad, el tabaquismo...

Por su parte, el segundo trabajo ha llegado a conclusiones muy similares, aunque ha establecido que el celecoxib -principal competidor de Vioxx- es menos perjudicial para el corazón que su rival y que el resto de antiinflamatorios tradicionales.

En cualquier caso, tanto los autores de dichos estudios, como los firmantes del editorial que se publica junto a ellos, advierten de que las conclusiones deben ser interpretadas con cautela y que los pacientes no deben interrumpir sus tratamietos.

En función de los mismos deberán diseñarse las estrategias terapéuticas más convenientes para los pacientes que requieran tomar estos productos en periodos prolongados.

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