Las sustancias probióticas pueden ser terapéuticas en EII. Los alimentos funcionales y los probióticos pueden desempeñar una papel destacado en la reducción del riesgo de cáncer de colon, en la intolerancia a la lactosa y en la mejora del sistema inmunológico del aparato digestivo. Estos tres aspectos han sido explicados por Manuel Serrano Ríos, Ana Sastre y Ascensión Marcos, recogiendo algunas conclusiones del Congreso Internacional de Nutrición celebrado en Viena.
Los alimentos probióticos pueden representar un papel importante en el mundo de la salud. Según han explicado Manuel Serrano Ríos, Ana Sastre y Ascensión Marcos, la ingestión de bacterias vivas incorporadas a un ácido láctico ejerce un beneficio sobre la salud. "Las sustancias probióticas pueden prevenir el riesgo de padecer cáncer de colon así como enfermedades inflamatorias del tracto digestivo y mejorar la intolerancia a la lactosa si su ingesta es suficiente y constante", ha señalado el profesor Serrano Ríos, catedrático de Medicina Interna de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid.
Ascensión Marcos, directora del Instituto de Nutrición y Bromatología, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha afirmado que "está demostrado que los probióticos cumplen una función preventiva sobre los individuos sanos, al tiempo que desempeñan una labor terapéutica en determinadas patologías, como gastroenteritis, alergias o algunos tumores intestinales".
Prevención
La experta ha señalado que actualmente se están realizando investigaciones para determinar cuáles son los efectos del consumo de estos alimentos en la prevención de enfermedades gastrointestinales, del cáncer, de ciertas alergias y de la enfermedad de Crohn.
La vicepresidenta del Instituto Danone, Ana Sastre, quien junto a Serrano Ríos y a Marcos ha participado en el XVII Congreso Internacional de Nutrición, celebrado en Viena,Austria, ha subrayado la importancia que tiene el suministro de probióticos en la dieta alimentaria diaria. En ese sentido, la doctora Marcos ha destacado que una de las condiciones necesarias para obtener los efectos beneficiosos de los probióticos es ingerir esas bacterias lácticas vivas y activas en cantidad suficiente.
Lactosa
Los principales beneficios de los probióticos, según el panel de expertos, se centran, entre otros colectivos, en las personas intolerantes a la lactosa, ya que se ha demostrado que la ingesta de yogur con 108 bacteria/ml mejora la digestión de la lactosa, así como los síntomas de malestar digestivo, en comparación con el resto de los yogures.
Con respecto a la enfermedad de Crohn, los probióticos reducen la respuesta inflamatoria y en cuanto a los procesos diarreicos, el consumo de las bacterias podría tener un carácter preventivo, disminuyendo su incidencia y acortando la duración de la diarrea.
Medicina-comida
Cuando en el año 400 a. C. Hipócrates afirmó "deja que la comida sea tu medicina y que la medicina tu comida", no sabía el filósofo y médico griego que estaba formulando un criterio básico para la selección de todo tipo de alimentos, incluidas las sustancias probióticas.
Según Tore Midtvedt, del Laboratorio de Ecología Microbiológica del Instituto Karonlinska, en Estocolmo, Suecia, el término probiótico siempre debe incluir dos propiedades: las bacterias deben estar vivas y su suministro ha de hacerse por otras razones diferentes a las nutricionales.
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