Se ha demostrado que existe una excesiva producción de radicales libres en las personas afectadas por las Enfermedades Inflamatorias Intestinales y un grupo de investigadores pretende determinar si algunas vitaminas pueden neutralizar dicho exceso de radicales libres.
Los radicales libres, también conocidos como oxidantes, son producidos por el sistema inmune para combatir la inflamación. En aquellas personas que no padecen las EII, la producción de radicales libres es equilibrada por enzimas anti-oxidantes. Este equilibrio permite a los intestinos luchar la infección sin dañar la mucosa intestinal.
Para producir las enzimas anti-oxidantes, el organismo necesita los
siguientes nutrientes:
-Vitaminas C, E y beta-caroteno.
- Minerales cobre, manganeso, selenio y zinc.
La investigación indica que aquellas personas afectadas por
las EII tienen un mayor riesgo de desarollar deficiencia antioxidante.
La deficiencia de los nutrientes antioxidantes puede reducir la habilidad
innata del organismo para eliminar el daño oxidante. Normalmente
los enfermos con EII no ingieren en cantidad suficiente los nutrientes
anti-oxidantes. La razón suele ser una malabsorción causada
por la inflamación de los intestinos, o una dieta de fibras y baja
en grasas.
¿Por qué son importantes los antioxidantes?
Los estudios sugieren que los oxidantes podrían ser los responsables
del daño intestinal en las EII. Los investigadores conocen ya que
el epitelio (la capa exterior del intestino) actúa como una
barrera entre los contenidos del intestino y el resto del organismo. Durante
un brote, el epitelio tiene filtraciones, por ello puede ser vulnerable
a grandes cantidades de oxidantes. Si esta teoría es correcta, una
terapia que limitara la carga oxidante en el intestino podría favorecer
una reparación de los tejidos.
¿Podría conseguirse mediante un aumento en la cantidad de
anti-oxidantes presentes en el intestino?.
Con el objeto de responder esta pregunta los investigadores están
estudiando las enzimas anti-oxidantes producidas por el intestino. Estas
enzimas protegen a las células del daño causado por el sistema
inmune. Los científicos quieren conocer si podrían disminuir
la inflamación aumentando estas enzimas en las células
epiteliales.
Pero, incluso si la respuesta a la pregunta anterior fuera positiva
sería necesario efectuar más estudios antes de poder llegar
a una conclusión definitiva por lo que respecta al tratamiento con
vitaminas.
En primer lugar debe probarse que los radicales libres son responsables
del daño intestinal en las EII. Posteriormente tendrán que
determinar qué combinación y qué dosis de nutrientes
anti-oxidanes deben prescribirse para equilibrar el efecto de los oxidantes
sin riesgo de toxicidad.
De momento y hasta que se termine la investigación en este campo, es preciso que usted consulte con su médico antes de aumentar la ingesta de vitaminas y minerales.